El concepto de “final girl” ha saltado de las películas de terror clásicas a las redes sociales, convirtiéndose en un término viral con múltiples interpretaciones. Pero ¿de dónde viene esta expresión y por qué ha capturado tanto la atención de las nuevas generaciones?
Origen cinematográfico del término
“Final girl” se utiliza para describir a la última mujer sobreviviente en una película de terror, especialmente en los slasher films de los años 70 y 80. Ella es quien, después de presenciar cómo sus compañeros caen uno a uno ante el asesino, encuentra la fuerza para enfrentarlo o escapar. Iconos como Laurie Strode en Halloween o Sidney Prescott en Scream definieron el arquetipo: una figura aparentemente vulnerable que demuestra una gran capacidad de resistencia.
Este personaje suele tener características distintivas: es más reservada, moralmente correcta y, con frecuencia, no participa en los excesos (como drogas o sexo) que suelen estar vinculados a la muerte de otros personajes.
La evolución del arquetipo
Con el paso del tiempo, la “final girl” se ha transformado. Ya no es solo la joven asustada que sobrevive por instinto, sino una figura que toma el control de su destino. En películas más recientes, estas mujeres son inteligentes, estratégicas y, en muchos casos, activamente enfrentan al antagonista. Esta evolución ha reforzado su papel como símbolo de fortaleza y resiliencia.
¿Por qué se volvió viral?
En redes sociales como TikTok y Twitter, el término “final girl” ha tomado una nueva vida. Muchos usuarios lo utilizan para referirse, con ironía o admiración, a situaciones personales donde se sienten “los últimos en pie” después de momentos duros: una ruptura amorosa, una semana difícil o incluso sobrevivir a una noche de fiesta. También ha sido resignificado como una expresión de empoderamiento, especialmente entre mujeres jóvenes que se identifican con la figura de la que sobrevive a pesar de todo.
Este fenómeno también se vincula con la estética: vestirse como una final girl (jeans, camisetas sencillas, chaquetas), recrear escenas de películas o adoptar una actitud introspectiva pero determinada ha generado toda una tendencia.
Más allá del cine
El concepto ha inspirado libros, análisis feministas, e incluso ha sido utilizado en discursos sobre trauma, crecimiento personal y autodefensa. La “final girl” representa algo más que una sobreviviente: es la que aprende, se transforma y se levanta del horror con una mirada distinta.
Lo que encierra el mito moderno
La viralidad de este término no es accidental. En una época donde los retos emocionales y sociales se enfrentan cada día, muchas personas conectan con la idea de ser la última en pie, no como víctima, sino como símbolo de fuerza silenciosa. La “final girl” ya no vive solo en la pantalla: ahora camina con nosotros, adaptada a los tiempos, como una metáfora de supervivencia moderna.